A dios orando y con el mazo dando

Las personas se conocen.
Se enamoran.
Se reproducen.
Y después,……
Se hacen vegetarianas.






A finales de la 2 Guerra Mundial y los ambientes de la posguerra, hubo un compatriota con una visión comercia a largo tiempo, y creo el eslogan de “La dieta mediterránea”.

Pasaron los años, pasaron las modas…, y a finales del 2012 principio del 2013, Eureka han reinventado “la rueda”, si señores esas cabezas pensativas descubrieron “La dieta para vivir más años”  dicha dieta trata de incluir la proteína vegetal, fruta y verdura, cereales…  Dicho proceso contrarresta la oxidación de las células eligiendo bien lo que comes.

Para esa cabezas pensantes, por favor déjense de mirarse el ombligo y levante la cabeza, lo que han redescubierto es la dieta “VEGETARIANA”. Hay un refrán español que dice así “En el país de los ciegos, el tuerto es el rey”, creo que este refrán lo dice todo.

Muchos han sido los obstáculos encontrados en el camino, y mucho esfuerzo sin descanso. Pero el resultado de la perseverancia ha ido conquistando las etapas requeridas y necesarias para poder brindar al mundo los beneficios de la dieta vegetariana.

La madre naturaleza nos ha regalado los productos en cada estación del año. No solo para disfrutar a la mesa de sus sabores intensos, olores profundos y texturas carnosas. Las naranjas, repollos, lombardas, alubias o acelgas que protagonizan las de invierno refuerzan nuestras defensas, al tiempo que nos servirán para combatir con placer los rigores del frio.

Ya falta menos para la primavera, es una estación en la que todo es frescor, color y sabor despliega sus matices y abre un abanico casi infinito de posibilidades y combinaciones, que saben a gloria, como dirían nuestras madres, y además son muy saludables, tonificantes y digestivas, en la dieta vegetariana.