A veces examinamos nuestro confort con recetas muy complicadas, cuando en la tierra tienes todo lo que precisas. La clave como siempre está en las alternativas que obren con el respeto a ella la tolerancia y la armonía.
Por asuntos de hígado, el doctor restringió el alcohol a un conocido de la familia, pero el desempeño de esta fórmula no era fácil.
Era apasionado del vino, con un esplendido armario para conservarlos, pero su problema de costumbre era su falta de mesura. Divertirse si, abusar no ¿Cómo descubrir una bebida deliciosa y sana, que aliviara a nuestro amigo? Por suerte el remedio estaba al lado de casa.
En parte en el reducido huerto familiar, en apariencia de zanahorias y apios. Y en parte en el comercio más cercano, surtido de manzanas, peras y naranjas.
Las recetas para preparar un sabroso zumo de frutas y hortalizas, son muy conocidas, pero el uso día a día suele chocar con el problema de limpiar las licuadoras. Existe una solución que recomiendo. Son las nuevas licuadoras que han puesto en el mercado.
De alto rendimiento que te permite cambiar con velocidades variables, exprimir a fondo, y sacar hasta la última gota del zumo, y permitiendo aprovechar la pulpa, las fibras y las vitaminas que estas contiene.
Y la mayor novedad, es su limpieza fácil para no complicar la vida al usuario. Su principal inconveniente es que son más caras que los modelos tradicionales, una Kenwood JE730 de 1.000W, por ejemplo, sale por unos 174,32 €. Pero he encontrado una oferta de 118 € claro que bien mirado un utensilio de este tipo se amortizaría pronto, si se tiene en cuenta el ahorro de los envases de zumo.
En consecuencia este año mee comprado una y me la enviaron por mensajería gratis, veo las posibilidades de mezclar zanahoria, apio, naranja, limón, manzanas, pera, granada. Con un resultado sabroso y saludable.
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